miércoles, 10 de julio de 2013

TABAQUISMO


Estudios señalan que la demanda de tabaco a nivel del consumidor, está determinada, básicamente por cuatro variables; dos de las cuales son de naturaleza psico-social, mientras que las otras dos son de naturaleza económica.



En primer lugar, el gusto individual que tiene el fumar en el individuo, este es un factor subjetivo, el cual es adquirido por el individuo con el uso del cigarrillo en su entorno.

En segundo lugar, la naturaleza del bien; el cigarrillo es un bien que produce adicción debido a la presencia de ciertas sustancias que producen cierto “placer” en el consumidor.

Estas dos variables se pueden resumir enel factor “hábito”, el cual refleja variables psicológicas y sociales tales como, la presión social o el moldeamiento del individuo a través de los grupos sociales de referencia. Es importante señalar que dicho moldeamiento se realiza a edades tempranas, siendo el hábito un factor difícil de erradicar. La acción de estas dos variables, entonces, hace que el consumo de cigarrillos y productos del tabaco se mantengan e, incluso pueda aumentar en el tiempo.

Las variables de naturaleza económica son: El precio del cigarrillo y el poder adquisitivo de la población. El consumo de tabaco es susceptible de ser analizado como cualquier otro bien; en este sentido, tenderá a variar de manera inversa al precio de venta y de manera directa al ingreso disponible por los consumidores. En otras palabras, ante un aumento del precio de los cigarrillos, los consumidores tenderán a consumir menos; mientras que si el ingreso de los consumidores aumenta, el consumo también lo hará.

Pero lo que se ha observado es que el consumo no disminuye con el aumento del precios, Ello se debe a la fuerza de los factores psico-sociales en la determinación de la demanda, pero si aumenta a medida que el poder adquisitivo aumenta.

La encuesta realizada por la OPS en 1971 (Joly, 1977) en ocho ciudades de América Latina, conocida como la encuesta Joly, la cual incluyó la ciudad de Caracas. Esta encuesta levantada sobre una muestra de población cuyos estratos de edad comprendían los grupos entre 15 y 74 años, reveló en su conjunto, una prevalencia de 36,9%; y en términos desagregados 48,6% para los hombres y 26,3% para las mujeres.

En el 1984 el MSAS, por medio de la División de Enfermedades Crónicas adscrita a la Dirección de Epidemiología y Programas de Salud, realizo una encuesta con los siguientes resultados: Clase Alta: 7.1%; Clase Media: 14.7%; Clase Media Baja: 52.9% y Clase Baja: 25.3% . Por sexos; Masculino: 50.5% y Femenino: 49.5% y por Edad; 16-29 años: 48%; 30-49 años: 33% y mayor de 50 años: 19%.

La encuesta realizada por la encuesta realizada por la Organización Gallup para la American Cancer Society en 1988, arrojó para el país los siguientes datos: prevalencia global 27%, hombres 32% y mujeres 23%. Es decir que en 10 años bajo el consumo.

Para el año 1996 la Fundación Antitabáquica de Venezuela realizo una encuesta que arrojo los siguientes datos: Prevalencia nacional 30,6 %, hombres 37.4 y mujeres 23.8 %. Es decir que diez años después los datos son similares, se han mantenido y al año siguiente la repitió con los siguientes resultados: prevalencia global de 36%; 47% para el sexo masculino y 28% para el femenino. En el caso de los jóvenes, estableció una prevalencia del 7.0%.No tenemos conocimiento de nuevas mediciones en estos últimos diez años, suponemos que el problema se mantiene.

La prevalencia en los países del Mercosur son: Chile 42, 8 % (2002); Argentina 33,5 % (2004); Uruguay 32,3 (2001); Bolivia 28,6 %(2000) y Brasil 18,8 % (2003)


EL NEGOCIO DEL TABACO EN VENEZUELA.

En Venezuela el negocio del tabaco esta en manos de dos empresas: la Compañía Anónima Cigarrera Bigott, filial de la British-American Tobacco, la cual tiene aproximadamente el 73 % del mercado y la Compañía Anónima Tabacalera Nacional (CATANA), que opera bajo la licencia de Philip Morris Internacional, y satisface el resto del mercado.



Cada una de estas grandes empresas tabacaleras producen varias marcas de cigarrillos. La Compañía Anónima Cigarrera Bigott, produce las marcas:
 
 
 
Belmont, Cónsul, Kent, Lucky Strike y Cool. Por su parte, CATANA producía las marcas: Astor, Marlboro, Fortuna y Derby.

La siembra del tabaco en Venezuela ha disminuido, así, la superficie dedicada al cultivo de tabaco pasó de casi 10.000 hectáreas en 1986, a 8.500 hectáreas en 1998 y a 6.500 en 1999, para el 2007 apenas se sembraron 2.300 hectáreas.

Por su parte, la producción ha venido cayendo, para 1996 produjeron 16.000 toneladas, 13.000 en 1998 y a un poco más de 10.000 toneladas en 1999, para el 2007 se produjeron 5,7 toneladas. Sin embargo, la productividad se ha mantenido alrededor de los 1.600 Kgs. por Hectárea.

En el país actualmente se consumen 5 millones de cajas de cigarrillos diariamente, lo que representa un consumo per capita de 1.300 cigarrillos, para 1970 el consumo per capita era de 1947 cigarrillos, aumento para el 1980 a 2.300, para 1990 era 1.300, cifra que se mantiene.

De acuerdo con registros de la World Health Organization (OMS), Venezuela es la tercera nación americana con el mayor consumo de cigarrillos por persona, después de Estados Unidos y Canadá.

Es decir, es la primera en Latinoamericana. Sin embargo la Fundación Mundial del Pulmón que publico en el 2009 el consumo per capita en el mundo, señala que el país con mas alto consumo de cigarrillos per capita es Grecia con 3.017 unidades, seguido de Eslovenia con 2.537 y Ucrania con 2.526; mientras que en Latinoamérica es Argentina con 1.014 unidades per capita, el que ocupa el primer lugar, seguido de Paraguay con 968, Chile con 909 y el mas bajo Perú con 129. Venezuela no aparece en ese estudio.

Por otra parte, cabe destacar lo que la OMS/OPS (2000) reporta sobre el tema del contrabando de cigarrillos. Mientras el contrabando de cigarrillos en Venezuela se realiza en los últimos años con marcas desconocidas que se expenden a precios muy económicos (50% por debajo); años atrás, este comercio ilegal se hacía con cigarrillos producidos en el país (Belmont, Marlboro y Cónsul), que salían a países vecinos, como exportación, para evitar el pago de impuestos y luego reingresaban a territorio nacional de manera ilegal

La producción de cigarrillos ha ido aumentando entre 1967 y 1999, alcanzando un máximo de 24.000 millones de unidades en el año 1990; en el resto del período ha estado oscilando entre 15.000 y 18.000 millones de unidades

Como es posible producir cigarrillos para cubrir la demanda nacional si la producción de tabaco ha disminuido, pues la repuesta esta en que la industria ha logrado producir con 450 gramos de tabaco 1.100 cigarrillos, hace 40 años se producían con la misma cantidad de tabaco solo 438 cigarrillos y esto se ha logrado con la incorporación del tabaco expandido (con dióxido de carbono, nitrógeno o isopentano) o por mecanismos para agregar tabaco reconstituido (subproductos o desechos del tabaco procesados, por ejemplo tallos, así como partículas pequeñas o polvo de hoja) y le añaden sabores u aromas para reducir la naturaleza irritante del humo y al mismo tiempo crear características sensoriales similares a las obtenidas con hojas de muy buena calidad. Son más de 600 los aditivos presentes en el tabaco de los cigarrillos.

En Venezuela la industria del tabaco, generan alrededor del 1.7 % de las ventas del sector industrial y emplean directamente apenas unas 3.000 personas.

El impuesto al tabaco en el país es del cincuenta y seis por ciento (55,9) del precio de venta al público de la especie, mas el IVA; Brasil es quien impone el mas alto impuesto en America con el 73,5 %, seguido de Chile con 70,6 %, Argentina con 68,3. Uruguay con 66,5 %; lo mas bajos impuestos son en Estados Unidos y Dominicana con 20 % y Colombia con 28, 6 %.

EL COSTO EN SALUD

“Para el año 2030 las muertes ocasionadas por el tabaquismo se espera que alcancen la cifra de 10 millones al año, de los cuales el 70% ocurrirán en los países en desarrollo. Este total excederá las muertes causadas por la malaria, tuberculosis, diarreas infantiles y enfermedades de la madre combinadas. De gran importancia es el hecho de que la mitad de las muertes citadas ocurren en la edad media de las personas (35 a 69 años), que coincide con el período de mayor productividad y significación social” (Prabhat, Novotny, Feachem, 1998).

“En los países de ingreso alto, se calcula que el costo anual global de la asistencia sanitaria atribuible al tabaquismo oscila entre el 6% y el 15% del costo sanitario total“(Banco Mundial, OPS, 2000).

Según OPS, en Venezuela, dicho gasto representaba para 1998, el 1,5% del PIB, comparadas con las exhibidas por otros países, el nivel de Venezuela se acerca al promedio mundial.

En el año 2008, murieron 2576 personas por cáncer de pulmón atribuible al fumar cigarrillos; y por enfermedad broncoobstructiva crónica 2091, esto representa el 23,6 % de las personas que mueren por cáncer. Iguales porcentajes registra Estados Unidos y Canadá.

El grupo más vulnerable por sexo es el masculino, sin embargo en los últimos años el porcentaje de mujeres que mueren por cáncer de pulmón presenta un ligero aumento, de 36 % en 2006 a 40,8 % en 2008. La mayoría de las muertes ocurren después de los 60 años.

En cuanto a las muertes por la enfermedad broncoobstructiva crónica, ésta se presenta en hombres, observándose el mismo fenómeno donde la relación entre hombre y mujer ha ido cambiando.



LAS POLITICAS ANTITABAQUICAS VENEZOLANAS.


 


La OPS ubica a Venezuela entre el pequeño grupo de países (5%) que ha implantado políticas exitosas para el control del tabaco y sus efectos, y considera que el reto ahora es logar que 100% de los fumadores sean tratados tempranamente en los servicios de salud, para que dejen de fumar.

Con el Decreto Nº 849 de la Gaceta Oficial Nº 32.116 del 21 de noviembre de 1980, se prohíbe la transmisión televisada de toda publicidad comercial que induzca directa o indirectamente al consumo del cigarrillo y demás productos derivados de la manufactura del tabaco, que luego se extendió a los demás medios y posteriormente a las autopistas y vías importantes Venezuela es pionera en esta medida.

El MPPPS prohíbe que en sus instalaciones se fume, igualmente lo han hecho las Universidades y otras instituciones, iguales restricciones existen en el tráfico aéreo, algunos centros comerciales, la banca, y muchos establecimientos comerciales.

En Venezuela es prohibido vender cigarrillos a los menores de 18 años, es probable que esto no se cumpla ya que los cigarrillos se expenden en pequeños abastos y kioscos, que canalizan cerca del 43% de la oferta.

A mediados de 2005, una resolución gubernamental obligó a las empresas tabacaleras a estampar en las caras frontales de las cajetillas de cigarrillos fotografías y textos con evidencias explícitas sobre los diversos daños al organismo que causa el consumo de tabaco

Sin embargo, existen en el país defensores de las empresas tabaqueras, como lo demuestra el “incidente” del ministro de salud Erick Rodríguez, quien en 2007, aseguró que el gobierno estudiaba prohibir la producción de cigarrillos y tabaco en todo el país y al día siguiente el ministro negó todo, dijo que se trataba de una opinión personal y días mas tarde dejó el cargo al alegar “motivos personales”

El otro incidente se presento el mes pasado cuando apareció en la Gaceta Oficial Nº 39.623 del 24 de febrero de 2011 la Resolución 014 del Ministerio del Poder Popular para la Salud, sobre “Ambientes sin humo de tabaco”, la norma prohíbe fumar en ambientes públicos, de trabajo o en interiores y busca “proteger a aquellos fumadores pasivos, que reciben el humo tóxico de los fumadores activos, así como cumplir con las metas del milenio en materia de salud y declarar a Venezuela zona libre de humo”.

Al día siguiente en la Gaceta Oficial apareció la Resolución 030 que declara la nulidad de la Resolución del día anterior. Lo extraño fue que recogieron la Gaceta y ahora en la que aparece en la Web, no aparece el decreto de nulidad, que aquí fotocopiamos.

Esperamos que en esta escaramuza la Resolución Nº 014 quede viva y entre en vigencia en el mes de mayo (próximo), tres meses después de su aplicación en Gaceta Oficial, para que el día de no fumar, el 31 de mayo tengamos la ciudad libre de humo, aunque la resolución no trae cuales son las sanciones de quien la infrinja.

Natasha Herrera, consultora de tabaco de la Organización Panamericana de la Salud, habla de las seis estrategias para contrarrestar la epidemia de tabaquismo: 1) Monitorear el uso del tabaco y las políticas de prevención; 2) Proteger a las personas del humo de tabaco; 3) Ofrecer tratamiento para ayudar al abandono del tabaco; 4) Alertar acerca de los daños que causa; 5) Cumplir las medidas de prohibición de publicidad, patrocinio y promoción del tabaco; y 6)Aumentar los impuestos al tabaco.

EL TRATAMIENTO DEL TABAQUISMO





Las directrices actuales en el tratamiento de la dependencia nicotínico establecen que el tratamiento farmacológico debe ser ofertado a todo paciente fumador que quiera hacer un intento serio de abandono, exceptuando los casos en los que existan contraindicaciones.

Con el tratamiento farmacológico se puede conseguir que hasta un 15-30% de los pacientes se mantengan abstinentes al cabo de un año, triplicando las posibilidades de éxito frente al abandono espontáneo.

El tratamiento farmacológico debe ir siempre acompañado de apoyo psicológico, siendo esta combinación la reconocida como más eficaz para ayudar al fumador a dejar de serlo.

Los tratamientos farmacológicos de primera línea son: los sustitutivos de nicotina-parches, chicles, comprimidos sublinguales y spray nasal-el hidrocloruro de bupropion y la vareniclina. Como fármacos de segunda línea se han mostrado eficaces también el clorhidrato de nortriptilina y el clorhidrato de clonidina.